El cirujano francés Joël Le Scouarnec enfrenta un juicio histórico por abuso sexual infantil

El excirujano francés Joël Le Scouarnec está en el centro de uno de los casos de abuso infantil más graves en la historia judicial de Francia. Acusado de agredir sexualmente a 299 víctimas, en su mayoría menores de edad bajo su cuidado médico, Le Scouarnec, de 74 años, enfrenta un juicio en el tribunal penal de Morbihan en Vannes, Bretaña. El proceso, que se espera dure cuatro meses, podría resultar en una condena de 20 años adicionales a los 15 que ya cumple desde su sentencia en 2020 por la violación y agresión sexual de cuatro niños.

Aunque no niega los hechos, Le Scouarnec alega no recordar muchos de ellos. Algunos sobrevivientes, al haber estado inconscientes en el momento del abuso, tampoco tienen memoria de lo ocurrido. Este juicio se produce en un contexto de creciente concienciación sobre los abusos sexuales en Francia, impulsada por casos mediáticos como el de Gisèle Pélicot, quien fue drogada y violada por múltiples agresores, condenados en diciembre a penas de prisión de entre tres y 20 años.

El caso de Le Scouarnec salió a la luz en 2017, cuando una vecina de seis años lo acusó de tocamientos indebidos. Una posterior investigación reveló en su hogar más de 300,000 fotos, 650 videos explícitos y cuadernos en los que detallaba sus crímenes y nombraba a sus víctimas. Aunque confesó haber cometido abusos desde la década de 1980, algunos delitos no pueden ser procesados debido a la prescripción legal.

El juicio actual examina delitos cometidos entre 1989 y 2014 contra 158 hombres y 141 mujeres, quienes tenían en promedio 11 años en el momento de los hechos. Según la investigación, el excirujano aprovechó la vulnerabilidad de los niños hospitalizados para agredirlos en sus habitaciones cuando estaban solos.

Para muchas víctimas, descubrir sus nombres en los diarios de Le Scouarnec supuso un impacto devastador. Amélie Lévêque, una de ellas, recordó su hospitalización a los 9 años en 1991 y describió la angustia de enterarse de lo que había sufrido.

A pesar de haber sido condenado en 2005 por posesión de material de abuso infantil, Le Scouarnec pudo continuar ejerciendo la medicina. Organizaciones de protección infantil se han sumado al proceso legal con el objetivo de endurecer las regulaciones y prevenir casos similares en el futuro.

El abogado de Le Scouarnec, Thibaut Kurzawa, aseguró que su cliente responderá a las preguntas del tribunal, reconociendo la gravedad de las acusaciones. Mientras tanto, grupos de derechos infantiles y de mujeres han convocado manifestaciones frente al tribunal a medida que avanza el juicio.