X

Síguenos en Facebook

Muere comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán en ataques israelíes

Yesterday 11:20
Muere comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán en ataques israelíes

Hossein Salami, comandante del Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos (IRGC) de Irán, murió en una serie de ataques aéreos israelíes el viernes por la mañana, lo que marca una escalada significativa en la región. Los ataques supuestamente tenían como objetivo instalaciones nucleares, sitios de producción de misiles y altos líderes militares iraníes. La muerte de Salami es vista como un duro golpe para Teherán, dado su estatus como figura clave en el establecimiento militar y político de Irán.

Salami, de 65 años, era ampliamente reconocido por su retórica dura y su firme oposición a los adversarios de Irán, en particular Israel y los Estados Unidos. Solo semanas antes de su muerte, había advertido que cualquier ataque contra Irán provocaría una respuesta devastadora, declarando la preparación total de Teherán para la guerra.

escalada de hostilidades

El gobierno israelí declaró que los ataques aéreos tenían como objetivo contrarrestar la supuesta expansión de los programas nucleares y de misiles balísticos de Irán, así como su influencia a través de grupos proxy en la región. Esta operación se produce a pesar de las preocupaciones de los Estados Unidos, con el presidente Joe Biden advirtiendo a Israel sobre no arruinar los esfuerzos diplomáticos para reactivar el acuerdo nuclear con Irán.

El liderazgo iraní condenó rápidamente los ataques, advirtiendo que tanto Israel como Estados Unidos enfrentarían graves consecuencias. Los ataques han intensificado los temores de un conflicto más amplio en una región ya volátil.

Entre los fallecidos en los ataques se encuentran Mohammad Bagheri, jefe del Estado Mayor de las fuerzas armadas de Irán, Gholamali Rashid, subcomandante de las fuerzas armadas, y varios científicos nucleares. Las pérdidas representan un grave revés para la jerarquía militar de Irán.

un legado de desafío

La carrera militar de Hossein Salami comenzó durante la Guerra Irán-Irak en los años 80, cuando se unió al IRGC. Ascendiendo en las filas, se convirtió en subcomandante en 2009 y asumió el liderazgo de la organización una década después.

A lo largo de su mandato, Salami fue un crítico abierto de Israel y Estados Unidos, emitiendo con frecuencia amenazas de represalias. Tras ataques israelíes anteriores a objetivos iraníes, había prometido eliminar a Israel, calificándolo como un "régimen sionista" que Irán borraría del mapa. Sus declaraciones reflejaban la política más amplia de Irán de negar el derecho de Israel a existir, una postura consagrada en la ideología del país desde la revolución de 1979.

Salami también fue sancionado por la ONU y los Estados Unidos por su participación en los programas militares y nucleares de Irán. A menudo alardeaba de las crecientes capacidades militares de Irán, afirmando que estaba al borde de convertirse en una potencia mundial.

los guardias revolucionarios: poder e influencia

El Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos (IRGC) es una poderosa rama del ejército iraní, establecida en 1979 para proteger al régimen y su sistema islámico. Con más de 190,000 efectivos activos y sus propias fuerzas terrestres, navales y aéreas, el IRGC opera independientemente del ejército regular de Irán. También supervisa la Fuerza de Resistencia Basij, un grupo paramilitar desplegado con frecuencia para reprimir la disidencia interna.

Más allá de su rol militar, el IRGC ejerce una influencia política y económica significativa, controlando una parte sustancial de la economía de Irán a través de subsidiarias y contratos lucrativos. Su fuerza élite Quds gestiona operaciones en el extranjero, brindando apoyo a grupos aliados como Hezbolá en el Líbano y varias milicias en Siria, Irak y Yemen.

Los exmiembros del IRGC continúan ocupando posiciones prominentes en el gobierno de Irán, reflejando el control duradero del grupo sobre las estructuras de poder del país.

implicaciones para la estabilidad regional

El asesinato de Salami y otros altos funcionarios ha dejado a Irán prometiendo venganza, desestabilizando aún más un panorama geopolítico ya frágil. Los ataques no solo han inflamado las tensiones entre Irán e Israel, sino que también corren el riesgo de involucrar a otras potencias regionales y actores globales.

Los observadores advierten que la situación podría degenerar en un conflicto más amplio, con Irán e Israel aparentemente reacios a reducir tensiones. Por ahora, el enfoque sigue siendo cómo responderá Teherán a esta pérdida sin precedentes dentro de su liderazgo.


Lire aussi