Myanmar Lucha Con las Secuelas del Terremoto Mientras Llega la Ayuda

Equipos de rescate y suministros extranjeros llegaron a Myanmar el domingo para asistir al país tras un devastador terremoto que dejó más de 1,600 muertos y causó daños masivos. El sismo de magnitud 7.7, uno de los más fuertes en un siglo, sacudió la nación el viernes, dejando 1,644 fallecidos, 3,408 heridos y 139 desaparecidos, según el gobierno militar.

Naciones vecinas como India, China y Tailandia, junto con Malasia, Singapur y Rusia, enviaron asistencia humanitaria y equipos de rescate. Sin embargo, la catástrofe ha dañado gravemente la infraestructura de Myanmar, afectando carreteras, puentes, aeropuertos y vías ferroviarias, lo que dificulta las labores de socorro en un país ya afectado por la guerra civil.

En las zonas más impactadas, los residentes denunciaron la escasez de ayuda gubernamental, viéndose obligados a sobrevivir por sus propios medios. El jefe de la junta militar, el general Min Aung Hlaing, subrayó la necesidad de restaurar urgentemente las rutas de transporte, reparar los ferrocarriles y reabrir los aeropuertos para facilitar los esfuerzos de rescate.

El Servicio Geológico de EE.UU. estimó que el número de víctimas podría superar los 10,000 y que las pérdidas económicas podrían exceder la producción anual del país. Hospitales en el centro y noroeste de Myanmar, incluidas las ciudades de Mandalay y Naypyitaw, están desbordados con heridos, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.

El terremoto también afectó a Tailandia, donde el colapso de un rascacielos en construcción dejó 17 muertos. Mientras tanto, la crisis política en Myanmar, agravada desde el golpe militar de 2021, ha complicado aún más la situación. El Gobierno de Unidad Nacional, que representa a la administración derrocada, declaró un cese temporal de las hostilidades por dos semanas para centrarse en las labores de rescate.

La ciudad de Sagaing, cercana al epicentro, ha sufrido una devastación considerable, dejando a sus habitantes en una situación desesperada.