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La Mezquita Azul de Mazar-e-Sharif parcialmente dañada por un terremoto
Un potente terremoto de magnitud 6,3 sacudió el norte de Afganistán en la noche del domingo 2 al lunes 3 de noviembre, con un epicentro situado en la provincia de Balkh, cerca de la ciudad de Mazar-e-Sharif. Según el Ministerio de Salud afgano y el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), el sismo causó al menos 20 muertos y unos 320 heridos, además de daños considerables en numerosos edificios.
La Mezquita Azul de Mazar-e-Sharif (también conocida como Mazār-i Sharīf Blue Mosque), una joya religiosa y arquitectónica del siglo XV, considerada uno de los lugares más sagrados del país, resultó parcialmente dañada. Varios azulejos de cerámica se desprendieron, especialmente alrededor del minarete, y los escombros cubrían el patio interior. Sin embargo, la estructura principal sigue en pie, según imágenes de vídeo y testimonios locales.
El terremoto, con una profundidad estimada de 28 kilómetros, provocó sacudidas perceptibles hasta Kabul y deslizamientos de tierra que bloquearon varias carreteras. Las provincias más afectadas son Balkh y Samangan, donde los equipos de rescate enfrentan dificultades para acceder a zonas rurales aisladas.
La Mezquita Azul, conocida por su cúpula color turquesa y sus magníficos azulejos, constituye un símbolo cultural fundamental de Afganistán. Su vulnerabilidad frente a los movimientos sísmicos plantea nuevas preocupaciones sobre la preservación del patrimonio en un país debilitado por años de conflicto y con recursos limitados para la restauración.
Las autoridades talibanas han desplegado equipos de rescate y emergencia para asistir a las poblaciones afectadas, mientras que la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) y otras organizaciones humanitarias han anunciado su apoyo a las comunidades damnificadas.
Mientras los repliegues sísmicos siguen siendo una amenaza, el desafío es doble: socorrer a las víctimas de inmediato y emprender la evaluación necesaria para la restauración del patrimonio cultural, del cual la Mezquita Azul es uno de los emblemas más preciados.